Su anterior propietario, nuestro amigo y colaborador Vicent, estaba muy preocupado por los graves problemas de relación que, en los últimos meses, presentaba Rampa con su hasta entonces inseparable compañera labrador "Cora". Coincidiendo quizá con la mayor madurez de la perra, nuestra Rampa estaba siendo progresivamente más dominante y agresiva con su compañera labrador hasta llegar a ser la convivencia imposible entre ambas.
Evaluamos el caso y decidimos que era mejor quizá buscar una nueva familia para Rampa. Afortunadamente estoy muy feliz de anunciaros que Rampa ya vive con una familia que adora a los perros y que están entusiasmados con la llegada de la tibetana. La perra se ha adaptado muy bien a su nuevo hogar.
Os muestro unas fotos del día de la despedida de Rampa en gossos de sanadorlí y otras de Rampa en su nueva casa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario